Aunque pocos lo saben por estos lares desde octubre/2011, la multinacional DANONE ya no puede emitir propaganda alguna de su producto ACTIMEL por la televisión francesa, pues este lácteo no solo resulta un placebo sino que también lejos de mejorar la silueta produce el efecto contrario en los consumidores.

Informe del investigador Didier Raoult de la revista científica “Nature”:

Para el director del laboratorio de virología de la Timone de Marsella, los yogures y otras bebidas lácteas hinchadas de pro bióticos que nos hacen tragar desde hace cerca de 20 años tendrían una gran parte de responsabilidad en la epidemia de obesidad que golpea a los niños.

Los pro bióticos que Danone añade a saco en diversos yogures son según las alegaciones de la marca expuestas en la televisión, supuestamente “refuerzan » las defensas inmunitarias. Hay más de 1 millardo por bote de Activia o de Actimel (1 millardo = mil millones).

Lo bueno es que estas bacterias “activas y vivas”, según Danone, son las mismas que las que se utilizan desde hace mucho tiempo en la cría industrial como activadores del crecimiento para hacer engordar más rápidamente a los cerdos y pollos. Un cerdo atiborrado de pro bióticos, gana un 10% en la báscula.

O sea que Danone nos incita a criar a nuestros niños como cerdos o pollos

De hecho, a principios de año, los investigadores han tenido la idea de comparar la flora intestinal de los obesos y de los no obesos. Pero oh, sorpresa, los primeros estaban atiborrados de pro bióticos, esos que se encuentran precisamente en los yogures “santé plus”.

Didier Raoult Comenta: «Se han autorizado para la alimentación humana activadores de crecimiento utilizados en la cría (de animales), sin pararse a saber cuál sería el efecto sobre los niños » De golpe, este ha reclamado estudios para conocer el papel preciso de TODOS los productos lácteos en la epidemia de obesidad infantil.

Por otra parte no son solo los niños los que son víctimas de esta superchería : «He encontrado numerosas mujeres rellenitas a pesar de estar sub alimentadas, y que buscaban adelgazar desesperadamente limitándose a varios yogures al día y algunas chucherías”. Y, desesperante desilusión, continuaban engordando, y estaban cada vez más cansadas y frágiles…

Como vemos en los países en vías de desarrollo, continuamos consumiendo productos farmacológicos prohibidos en otras latitudes y ahora también debemos cuidarnos de los lácteos distribuidos por una de las multinacionales del rubro más grandes del mundo.

La Ley Nº 3.835 sancionada por la legislatura porteña declaró a la Feria de las Artesanías y Tradiciones Populares Argentinas del barrio de Mataderos como “Bien Integrante del Patrimonio de la Ciudad”.
Desde hace 25 años es un lugar de encuentro por excelencia donde se hermanan todas las tradiciones argentinas y que reúne a aproximadamente 15.000 personas los fines de semana. Desarrollándose en sus instalaciones actividades tales como las artesanías, festivales artísticos y destrezas criollas, además de una serie de actividades anexas y la existencia de más de 300 puestos con comidas y bebidas tradicionales.

Por tal razón, en la semana varios legisladores le brindaron un homenaje a este típico paseo porteño en la legislatura porteña. La diputada porteña, Delia Bisutti, promotora del proyecto convertido en ley, fue la responsable de organizar un evento al que asistieron el Ministro de Cultura del gobierno de la Ciudad, Hernán Lombardi; los legisladores, Aníbal Ibarra y Susana Rinaldi, además de personalidades de las expresiones folklóricas en lo musical.

Cabe consignar que la Feria fue declarada sucesivamente de interés cultural y turístico por diferentes órganos oficiales, como lo es la Subsecretaria de Cultura de la Nación, el Honorable Concejo Deliberante, la Secretaria de Turismo de la Nación, entre otros. El año pasado la Legislatura también declaró de interés cultural a los festejos por los 25 años.

La Feria de las Artesanías y Tradiciones Populares Argentinas ubicada en el barrio de Mataderos, es uno de los espacios culturales más importantes con el que cuenta la Ciudad de Buenos Aires, que ha contribuido con sus tareas culturales y sociales a consolidar la solidaridad entre los vecinos de la zona y los habitantes de la ciudad en general.

Esta feria es en verdad un anexo de la cultura ciudadana que trasciende las fronteras de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

La oftalmóloga de 61 años Graciela Reybaud, ex Subsecretaria de Atención Integrada de Salud fue nombrada Ministra de Salud del Gobierno porteño, en reemplazo de Jorge Lemus y es además la primera mujer en ocupar ese cargo en la historia de la Ciudad de Buenos Aires.

Previamente también se desempeñó como Directora del Hospital Santa Lucía, sito en el barrio de San Cristóbal, uno de los establecimientos que atiende más cantidad de pacientes, la mayoría procedente de la Provincia de Buenos Aires y que tiene un servicio de guardia durante las 24 hs. del día.

Mucho trabajo le espera a la nueva funcionaria ya que el Área de Salud es quizás la más cuestionada de toda la gestión machista, a tal punto, que los trabajadores resisten hasta la fecha el traslado de dependencias del GCBA al predio donde en la actualidad se encuentra el taller Nº19, lugar donde se rehabilitan pacientes psiquiátricos mediante el aprendizaje de tareas que les hacen mejorar su calidad de vida.
El ex ministro Jorge Lemus, que luego de cumplir su misión al frente de la cartera de Salud, pasará a ocupar la presidencia del Consejo Asesor de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, un canal institucional mediante el cual el GCBA promueve la actividad privada en materia sanitaria.

Lemús también conducirá los equipos técnicos de Salud de la Fundación Pensar y retomará su labor académica y profesional en el Hospital Fernández, donde realizó toda su carrera asistencial. Si hay algo para rescatar de su gestión , si bien no es un mérito profesional, es haber sido el Ministro de Salud de la Ciudad que más tiempo permaneció en su cargo.